Un espejo olvidado en la cima de la montaña es único testigo del romance entre dos jóvenes chagras, que han encontrado en la bruma del páramo un escondite y refugio. Deseo y angustia se entretejen en este cuento de Rommel Manosalvas; el aullido del vendaval y la garúa dan lugar a una atmósfera donde lo sobrenatural se va abriendo paso como niebla que desciende sobre los campos.